Sobre mí



Mi nombre es María Setefilla, éste último puede sonar algo exótico, su origen descansa en el pueblo de mi padre, Lora del Río.  Nací en Sevilla pero viajé a la capital para quedarme cuando aún no tenía uso de razón.
Estoy finalizando el último curso de la licenciatura de Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid. Ante todo comentar que considero esta profesión un oficio y, sobre todo, una pasión.
Presento una gran predilección por la escritura, adoro escribir, convertir la realidad en palabras y las palabras en realidad.  Respeto la información libre y valoro el poder de la misma.
Mi sueño es viajar, haciendo del camino el propio destino, y no dejar de conocer para aprender. De esta manera se ensancha la experiencia y se olvidan los prejuicios, algo esencial hoy día.


Foto tomada en Marrakech.
Me concierte todo lo que rodea al ser humano y las relaciones que presentan entre sí. Los ámbitos en los que me siento más cómoda trabajando son precisamente los destinados a la comunicación y el desarrollo, la cooperación internacional, la sociología y la cultura. Juro que no quise hablar de política hasta que me tocó.
Las colaboraciones en prensa escrita, digital y radio que he ido realizando desde 2008 han ayudado a que vaya perfeccionado  el tratamiento del lenguaje propio de los medios de comunicación y la capacidad de adaptación a los distintos registros que exige cada cual.  Recuerdo con especial cariño los primeros pasos en el mundo FM con Onda Cero.
Considero un éxito a nivel personal crear y participar en  ’ La Voz de los SinVoz’, un proyecto que nace con muchísima ilusión y quejunto con mi compañera  Laura Morales, estamos sacando adelante para intentar convertirlo en una plataforma de expresión cultural.

                          



 "Espíritu rebelde, navegas en tu propio arroyo, considerado un detractor de la ley social y desviado para los superfluos, para los sabios eres un espíritu libre, creativo, alejado de la sumisión de los 'poderosos patrones'. 
Buscas en la muchedumbre un ápice de benevolencia y lo único que encuentras es severidad.
Salvo aquellas pequeñas excepciones que para ti, lo son todo, los aprecias porque son singulares y aprendes de ellos, de sus cosas buenas y de las no tanto, son sinceros y libres como tu, y hacen algo que los demás no son capaces..... No es tan difícil, consiste únicamente en abrir la mente y comprender sin condición alguna."


María S.Olmo Rodríguez
 molmorod@gmail.com
Skype: mariaolmo.prensa


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